martes, 24 de marzo de 2009

Boots of spanish leather

Allá por las navidades más o menos creo yo, me compré unas botas de las que yo llamo de motero y que ya había gastado en mi alocada juventud: en color marrón, con hebilla en el lateral, vamos una pasada, y después de la primera semana de adaptación, comodisimas oiga. Me mola mucho caminar con ellas cuando vuelvo de currar, ya de noche y los pocos viandantes que a esa hora encuentras se giran ante el ruido de mi chulesco taconeo...toc, toc, toc.. la verdad que mola la hostia ..¡que coño!...
Luego llega uno a casa y parece que viene de, no se: perseguir a los indios o conquistar Iwo-Jima o algo de eso. Ahora si, cada vez que me las quito y las dejo en el suelo al llegar a la habitación no puedo evitar acordarme entre risas del chiste que contaba Luigi, aquel de: ¡Tira la otra hijoputa que no podemos dormir!


1 comentario:

Scout dijo...

LLevan la aventura dentro...