sábado, 9 de agosto de 2008

Given to fly

Wind in my hair, I feel part of everywhere
Underneath my being is a road that disappeared
Late at night I hear the trees, they're singing with the dead
Overhead...
"Guaranteed" Eddie Vedder.



Ayer alquilé la película "Hacia rutas salvajes"("Into the wild" 2007 Dir. Sean Penn). La peli no está mal, pero no es eso de lo que quiero hablar. La cuestión es que hoy he salido corriendo a comprarme la banda sonora. No es que haya descubierto nada nuevo, conozco a este muchacho desde sus más tiernos comienzos al frente de Pearl Jam. Pero sí me ha hecho confirmar mi total devoción por un músico que desde el primer disco del grupo de Seattle demostró que era mucho más que una cara bonita al frente de una banda de moda.

Mis recuerdos del primer contacto con la Voz de Vedder, (observen que la palabra voz va con mayúscula, lo siento Frank,) coinciden con una de las épocas más deliciosas de mi vida, en la que me ocurrían muchas cosas a la vez y los días parecían un continuo devenir de sorpresas y excitación.

Llevo muchos años escuchando esa simple maravilla del siglo XX llamada Rock and roll y no voy a negar que hay muchos otros cantantes que podría incluir entre mis favoritos, desde el idolatrado por mi hermana, Freddy Mercury hasta el gran Roger Daltrey, uno de los pocos a los que he visto mantener en directo el mismo nivel que en las grabaciones de estudio, pasando por el poderoso Chris Cornell o la deliciosa Yvonne Elliman. Pero a ninguno me siento tan unido espiritualmente como a este ser humano dotado para volar, y que en mi opinión, pese a ser unos pocos años mayor que yo, ha conseguido con sus letras desenterrar la más brillante y sublime pepita de mi generación, y lanzarla a los cuatro vientos con la fuerza de un vendaval.
Realmente en sus letras veo tomar forma todas las aspiraciones, frustraciones y rebeldía que he sentido en todos estos años desde que dejé de ser niño. Todo expresado con ese lenguaje que empezó a caracterizarnos a cierta juventud de principios de los noventa, y envuelto en ese torrente salvaje que es la voz de este genio, aullante como el filo de una navaja o tan profundo que te golpea en el pecho hasta hacerte caer a tierra entre una nube de polvo para luego volver a elevarte sobre las más altas cumbres. Para mi, musicalmente hablando, hay pocos placeres tan dolorosos como el de dejarme desgarrar el alma por la voz de Eddie Vedder. Por eso, una y otra vez, hasta el día de mi muerte, gracias....



7 comentarios:

G. K. Dexter dijo...

Muy buenas, Rumbonín.
Acerca de los enlaces musicales que incluyes sólo puedo decir que permiten "abrir los ojos" casi tan bien, cuando no mejor incluso, que las maravillas que prepara Tío Willy (aunque Mcaulay Connor esté dispuesto a vender a su madre por una de ellas).

Un saludo cinéfilo-musical.

Rumbonín dijo...

Bueno, aquí hay unos cuantos enlaces a lo que yo llamaría "mis gustos musicales politicamente correctos"
Algún día escribire un post sobre mis "perversiones musicales"

Preparaos!!!!
Creo que ya oigo los violines...

G. K. Dexter dijo...

Maese Rumbonín.
Y ahora algo completamente diferente...

Antes de que nuestros candorosos oídos sean violentados (juas, juas,...) te agrego a continuación un enlace que me he encontrado durante mis incesantes rastreos internautas: John Ford y "The Searchers".

Nada, a ver para cuándo ese post que anuncias, mientras tanto sólo nos queda esperar y esperar y esperar y esperar y esperar y esperar...

Un abrazote cinéfilo.

Anónimo dijo...

Sin duda una de las grandes personalidades del rock and roll de finales del siglo XX, mérito alcanzado más por cualidad que por cantidad.......Así que ratifico y doy fe las palabras de mi Rumbonín, pues no sólo conozco la obra del referido sino que he tenido la suerte de compartir directo con su banda -del lado del publico, eso si, pero en no menor unión-.
Y todo eso alive!!!!!! Ahí queda eso.
Besinos

Rumbonín dijo...

maría:

Todavía espero que algún día podamos compartir juntos el placer de escuchar en vivo a este grande, como muchos otros recuerdos maravillosos que ya hemos disfrutado juntos.

Ahora es momento de echarse a la carretera¿te apetece?

Love and kisses!!!

walkingpolaherba dijo...

Pues para cuando vuelvas de la carretera no te olvides de las perversiones musicales, que el tema da un morbillo...je je...¿Por dónde irán los tiros?

G. K. Dexter dijo...

"But the others wait in Casablanca ... and wait ... and wait ... and wait".

Un saludo cinéfilo.