viernes, 12 de diciembre de 2008

Dust bowl.

Estoy leyendo los primeros capítulos de "Las uvas de la ira" de John Steinbeck mientras escucho el magnifico "Good as i been to you" de Dylan y estoy flipando. Ha habido un momento en que estaba tan inmerso en la lectura sintiendo la guitarra acústica sobrevolando mi cabeza, que he tenido una especie de revelación, y esta era que lo que leía y escuchaba eran la misma cosa: el polvo de las carreteras, el trabajo desesperanzador, el coraje, la furia, el viento que recorre la extensa América y la locura de sus habitantes siempre vagabundos. El rugido poderoso y cruel de América, esa tierra que nunca he pisado pero que en forma de discos de rock and roll, novelas y películas recorre mi mente de lado a lado. He visto el espíritu de Woody Guthrie, he visto la esencia y el corazón de las letras de Dylan, la sorda desesperación del "Nebraska" y de las mejores películas de John Ford. Por un instante, las inmensas llanuras, las desiertas autopistas y los devastados campos han entrado en mi habitación, casi ahogándome con su magnificencia y su grito, grito susurrado que muy pocos escuchan.
He saltado de la cama y he empezado a escribir.



4 comentarios:

Scout dijo...

Rumbonín¡¡: Really, really te superas a tí mismo cada día que posteas. Y no lo pongo subrayado y en negrita porque no se puede:Se respira y se siente el aliento y la nostalgía de otras épocas más románticas y salvajes en tus posts, en cada frase se percibe a Dylan. Gracias por apostar en tus relatos por el "wild side" de la vida es una ráfaga de aire caliente del desierto.
Saludos¡

Rumbonín dijo...

Es que a veces, el más autentico "wild side" es el que uno se inventa e imagina. Especialmente cuando pasas la mayor parte del tiempo entre el curro y el sofá.

Gracie mile bambina!!!!

Besucos!!!

Guti dijo...

A estas alturas, estoy convencido de que sabes más de los USA que la mayoría de sus habitantes.

No has estado allí, está lejos, pero eso es precisamente un horizonte. Mucha de aquella gente no lo tiene, y no es consciente de lo que hay más allá, y no han escuchado a Steinbeck, ni leído a Dylan.

Rumbonín dijo...

Bueno, tengo que decir que respecto a los USA es tanto lo que me fascina como lo que me repugna. Por una parte, tienen a Dylan, a Steinbeck, a John Ford y a Charlie Parker. Por otra nos han regalado: el intervencionismo militar, la bomba atómica, George W. Bush, y los combates de Pressing catch.
Supongo que lo que a mi me gusta de los USA ya no existe y quizá nunca existió salvo en la mente de algunos escritores y artistas. De todas formas, para mi, es un buen lienzo sobre el que esbozar mis rojos atardeceres.

Saludotes!!!